Octubre del 2017 será recordado en Casa Azul como el mes de la sorpresa, pero particularmente para la que pinta en casa, octubre fue el mes que quise que se acabara. No suelo querer que pasen los días, ni los meses, ni los años, pero con octubre necesité un cambio aunque fuera de nombre, por muchos motivos, ninguno grave, pero sí me estaban ahogando. Por eso Noviembre llega como el super héroe, a salvarme y arreglarlo todo. Ha empezado bien, con sus mañanas llenas luz y sus fines de semana tranquilos. Ha traído las ganas de pintar y coser, y los olores a tarta recién horneada.
Bienvenido, Noviembre.
Y aquí les dejo las fotos de los últimos trabajos que hemos hecho. Las bolsas de desayuno, o talegas, como siempre pintadas a mano y reutilizando telas.
Y la toalla de cabeza para una niña llamada Elena, confeccionada con un retal y un trozo de una toalla rota.
Nos "vemos" en la próxima entrada que será una receta..
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