domingo, 25 de octubre de 2015

Reciclando lata de aceite de 5 litros para Halloween y más cositas

Hola amigos,
Estamos preparándonos para Halloween, una de esas fiestas que viene con polémica por ser nueva aquí, al menos en mis islas Canarias.
A mí no me parece mal que se celebren fiestas, ya sean de aquí o de otro sitio. Las fiestas son fantásticas, alegres y divertidas. Lo que sí veo mal es que se olviden las tradiciones viejas, las de nuestros mayores. Esas son las que hay que reforzar. Aquí el día 1 de noviembre se celebra el día de Finados, pero si les digo la verdad, yo esa tradición no la conocía. He sabido de ella después de que haya llegado Halloween y se nos haya colado por las rendijas. El día de Finados, las familias se reunían a comer castañas y a hablar de sus familiares fallecidos. En mi casa nunca hemos celebrado esta fiesta, ni la de Halloween, pero ahora tengo niños, y hasta en el colegio preparan cosas para decorar, pintar y manualidades. Y no me digan que no son divertidas. Todo en plan terrorífico, me encanta.
Nosotros hoy hemos hecho algunas cositas para decorar la entrada de casa para la noche del 31 de octubre.
 
 
 Este Frankenstein tan simpático lo hizo mi hijo con una lata de aceite, una bolsa de plástico verde, otra de papel negra y unos corchos de botellas de sidra. Usó algo de cinta adhesiva y un poco de pegamento de barra, pistola de silicona caliente y pintura plateada.
Este lo hemos hecho para decorar la entrada de casa, pero se puede hacer abriendo la lata, limpiándola bien y lijando los bordes para que no corten, se le añade una cuerdita con unos agujeros y sirve para poner las golosinas que los niños recaudan cuando tocan a la puerta con el "truco  o trato"
 









Primero recortó la bolsa negra a medida, y también la bolsa verde. Como esta última era algo transparente, le puso un folio usado  por detrás. Pegó todo con un poco de cinta adhesiva. La boca, los ojos y la cicatriz están hechas con trocitos de papel de la bolsa negra y trocitos de folios usados.
Los corchos los pintó con pintura plateada y los pegó con algo de silicona caliente.







El peque está muy orgulloso de su trabajo, y no es para menos. Le quedó genial
Otras cosas que hemos hecho:

Con una bolsa negra de una conocida marca, la recortamos para hacer una tela de araña. La tejedora es una araña hecha con una tapa roja, a la que le añadimos unas patitas y ojos. La hemos pegado a la pared con un poco de blu tack.







Hemos hecho pruebas de maquillaje y han salido genial, daban miedito.

















Y aquí tenemos todo junto, esperando su turno para asustar a los visitantes de Casa Azul. Los murciélagos los hicimos recortando una carpeta que estaba rota, y el fantasmita es un globo tapado con un trapo.
¿Recuerdan aquella sandía que dejé secar y usé como macetero? Pues le cortamos los ojos y la boca y será un portavelas terrorífico, jajaja













Feliz noche de Finados, de brujas, feliz Halloween, ...
Felicidad siempre y sobretodo ;)

domingo, 11 de octubre de 2015

Cambiamos de tercio: La historia de nuestro humedal artificial.

   Tener una casita en una zona rural es una de las mejores cosas que me han pasado (a nivel "material") en mi vida. En ella disfrutamos del ocio veraniego, de los fríos inviernos, de los festivos puentes. La Naturaleza nos brinda su mejor cara en esta maravilla de lugar. 

   Uno de los problemas con los que nos encontramos fue el de cómo gestionar las aguas residuales, grises y negras ya que en la zona no había alcantarillado y no queríamos usar productos químicos, hacer las cosas de la manera más limpia posible.
 


   Buscando información, preguntando y consultando a gente que sabe, resolvimos el problema creando nuestro humedal artificial maravilloso. Me siento tan contenta por cómo funciona. Les cuento en resumen de qué se trata:
   Las aguas sucias pasan primero por una fosa séptica enterrada en el suelo, completamente sellada. Y de ella pasan ya las aguas sin sólidos, al humedal. ¿Y qué hace el humedal? Pues con sus gravas  y con su tierra, "limpia" las aguas por un proceso físico, y luego las raíces de las plantas siguen "limpiando" las aguas por un proceso químico. Básicamente tenemos entre manos una depuradora natural.



(más información: http://www.selba.org/EspTaster/Ecologica/Agua/HumedalSubsup.html)
  
Este mecanismo sólo da beneficios: Es bonito (un jardín), las aguas después de ser depuradas sirven para regar los árboles, no tiene casi mantenimiento (sólo podar de vez en cuando y quitar plantas cuando salen demasiadas, como mucho una vez al año). Es un lujo.
 
   Les enseño cómo lo hicimos:
 
Enterramos la fosa séptica. Las  aguas sucias llegan por nivel aquí antes de al humedal. Los sólidos caen al fondo por sedimentación.
Fosa séptica ya enterrada. A ver si encuentras las tapas.


Ya tenemos el hueco hecho con las tuberías de entrada y salida de aguas.

 
Colocando la lona impermeabilizante, para que las aguas no pasen y se filtren.



Una vez la lona está bien colocada, y con las tuberías ya en su sitio, se pone la grava, de 2 tamaños y en sus posiciones para que hagan el proceso físico.





Aquí ya la estamos llenando con la tierra donde irán las plantas.

Quedaría así, cuando aún no tiene las plantitas.
Después de un tiempito seco y con las plantas aún jóvenes, tuvimos que regar

Las plantas que pusimos son: ñameras, calas, platanillos, paragüitas y juncos. Cada una con una función específica, y ordenadas en líneas.

Después de unos meses, ya las plantas han crecido y el humedal es un jardín.




Con la llegada del invierno, se pone así de bonito.

sábado, 10 de octubre de 2015

Nayra y Alba tendrán delantales nuevos.

Y no solo delantales, también un gorro de cocinera (o pastelera en este caso) cada una, a juego.
Y es que el delantal y el gorro que le hice a Álvaro, parece que gustó y después han venido más encarguitos. Lo malo: que no tengo tantos metros de tela para poder hacerlos (ya saben que reutilizo telas, o uso retales que me regalan), así que les he tenido que pedir que las compren. O sea: no hay nada reciclado en estos delantales.
Me dijeron: Dos niñas morenas, una con el pelo liso, y la otra lo tiene rizado. Y con esto, empezamos.
Saqué el patrón de un delantal que tenía en casa, le quité un para de centímetros para ajustarlos a las edades de las niñas.
Los modelos que salen en las fotos son mi hijo y un amigo, que se echaron unas risas cuando les comenté que quería sacarles unas fotos con los delantales puestos. ¡¡Y qué bien posaron!!
Las fotos no las tomé en el mejor lugar, porque la pared tiene un color muy parecido al de los delantales, y no favorece, pero con las prisas por entregarlos, no me di cuenta.

 Alba hizo unas ricas galletas de chocolate
A Nayra le tocó decorar unas preciosas cupcakes



















En el bolsillo les dibujé unas varillas y un rodillo, para alegrar algo más el conjunto.

 
Y les dejo a los modelos por separado, luciendo con garbo los diseños de Casa Azul.


 Espero que los disfruten y sobretodo, les den mucho uso. Si hacen unas galletitas, chicas, acuérdense de la costurera ;)